Los superclásicos se han convertida año tras año en un espectáculo mundial. La ultima final disputada en Madrid, elevo el grado de show de este tipo de partidos, que más allá de un superclásico del futbol argentino, se ha convertido en el mejor superclásico mundial.
El pasado diciembre de 2018, Madrid se convirtió en la capital del futbol mundial, albergando una de lo mejores clásicos del fútbol. Por no decir el mejor. No por el grado de juego de sus equipos, sino por la pasión de cada una de las hinchadas, y por lo que se juegan en cada equipo cada vez que se enfrentan.
La disputa por ser el campeón de la Copa Libertadores de fútbol, elevo la categoría del clásico nacional, a clásico internacional, y este se hizo cada vez más mundial.
Los eventos violentos sufridos en la cuidad y la posterior final disputada en Madrid rompieron todos la organización del evento.
Sin embargo, existieron otros clásicos, que siendo menos importantes, fueron más espectaculares a lo largo de la historia de Boca y River.
A Doble Partido por la Supercopa Argentina
Previo a la clasificación de ambos cuadros a la final de la final de la Copa Libertadores de fútbol, se disputó otra gran superclásico como final. En esta ocasión por la Supercopa Argentina, donde en este caso River fue el vencedor del encuentro por 0 a 2.
River no era favorito y tampoco lo sería por su juego ante Boca, pero valió más la puntería mostrada por lo dirigidos por Gallardo, que con dos goles sellaron la final contra Boca. Un preludio de lo que sería la gran final de la Libertadores.
La clásico mudo
Esta vez no fue una final, pero si un espectáculo. En este caso los goles no abundaron en el partido de vuelta disputado en La Bombonera. A puerta cerrada igual que en el monumental por motivos de seguridad, el partido fue muy distinto a lo vivido en otro clásicos.
En la ida, boca ganaría por 1-0, con gol del Flaco Schiavi, en un partido muy caliente con muchos roces entre ambos.
Con el resultado cosechado en la Bombonera, Boca, era un claro favorito, que lo veían como un claro candidato a finalistas.
La vuelta fue más caliente, todavía. Muchas cuentas pendiente quedaban del partido anterior.
Lospronósticosse empezaron a desequilibrar con el gol de Lucho González. Carlitos Tévez puso el 1-1 con una de las celebraciones más recordadas y polémicas: La gallinita. Sin embargo, de poco serviría. En el último suspiro, Cristian Nasuti hizo el 2-1, para volver locas a los hinchas de River y llevar el superclásico a definirse por penales.
En un escenario nunca visto, Boca venció en su casa vacía a River. Una victoria muda.
El último de Diego
Un superclásico tenso, y desconcertante.
Boca ganó como mejor sabe, donde siempre quiere ganar. En El Monumental. Un partido en que River fue dominador, pero no definidor. Y lo pagó caro, ya que Boca demostró que se puede ganar con la camiseta, y con dos goles de Toresani y Martín Palermo se llevaron la gran victoria del Monumental.
El clásico del ’97 presencio la toma de relevos entre dos grandes de Boca. Diego Maradona y uno de los destinados a sucederlo: Román Riquelme, que actuó de enganche para dar un poco de aire fresco al juego de Boca, en el que sería, el último partido de Diego Maradona como profesional del deporte que lo hizo grande. Un partido que quedó grabado en la historia.