Marcelo Bielsa, es y será, una referencia en el fútbol argentinoe internacional. Tanto por su forma de entender el fútbol, como la vida, Marcelo destaca y se hace querer, dejando huella allá por donde pisa.
Un loco por el fútbol de chiquito y un loco por el fútbol de mayor. Marcelo siempre tuvo en el fútbol su debilidad.
Marcelo Bielsa, de chiquito se saltaba las clases de piano, para ir a jugar al fútbol.
Marcelo Bielsa, Alma de entrenador como jugador
Un central con técnica limitada, velocidad relativa y temperamento. Así lo describe Jorge Griffa, su gran mentor, cuando era jugador en su etapa de Newell`s, con el equipo estaba en tercera división.
Sin embargo, más allá de sus características como jugador, Marcelo, era un entrenador, adentro de la cancha. Sus ex compañeros, lo definen como un dominador, que los corregía constantemente, y les exponía los errores que cometían en el partido.
Su visión del fútbol iba mas allá de jugar. Tenia un conocimiento profundo de los rivales, y solía manejar datos de otros equipos, tarjetas, debilidades o jugadores. No era un jugador cualquiera.
El vínculo con Diego
El debut en primera vino de la mano del mismo técnico que hizo debutar a Diego: Juan Carlos Montes.
Jugar en primera hizo que un joven Marcelo de 26 años, se retirara del fútbol. Había disputado únicamente solo tres partidos en primera con Newell`s y decidió dejar el fútbol como jugador, para empezar su camino como entrenador.
Este pasado no profesional generaba dudas en Marcelo Bielsa y no parecía ser un seguro para ningún club profesional. Para remediar esto, comenzó un proyecto en el año 1982, Bielsa empezaba como entrenador, donde junto a un equipo de la zona.
De aquella generación de rosario, que marcelo comenzó a formar, salio una camada de jugadores únicos, con nombres como Pochettino, Berizzo o Batistuta.
Un método único
Marcelo Bielsa, comenzó a implantar métodos nuevos de trabajo. Sesiones de entrenamiento que iban más allá de los común.
Algunos jugadores como Berizzo, recuerdan que el propio Marcelo alargaba las sesiones de entrenamiento más allá de lo normal con respecto a otros equipos.
El Newell´s de los 90
Con ya algunos años de experiencia, Marcelo se hace cargo por fin de un gran reto. Ser entrenador en primera de Newells, en el año 1990.
Como primera locura, fue subir con él a 10 jugadores de las inferiores. Todos comenzaban a conocerlo como el locoya, pero su locura tuvo su éxito.
Nadie tenía en cuenta a Newell`s para ser campeón. Sin embargo, ese mismo año, fue campeón del Torneo Apertura, donde disputo el campeonato, mano a mano con River entrenado por Pasarella.
Desde aquel momento, la trayectoria y sus métodos revolucionarios, cambiarían el futbol argentino y las apuestas deportivas. Marcelo consiguió entre los años 1990 y 1992, cuatro títulos nacionales, que pondrían a Newells como un serio equipo a tener en cuenta.
El loco, comenzaba por fin su camino hacia el éxito. Una apuesta segura. Un camino que no necesariamente estuvo plagado de títulos, pero si de anécdotas, historias y sobre todo, dejando huella sobre aquellas personas con las que trabajo.
Su larga y extensa carrera se encuentra ahora en Europa, donde a pesar que sus equipos no siempre son favoritos en las para ganar, muchos siguen esperando que repita una vez más los éxitos conseguidos en Newell`s, y que hicieron que Marcelo pronunciara una de sus frases más famosas: ¡Newell`s carajo!