Se terminó la edición de la Champions volviendo a tener como campeón a uno de los de siempre: Bayern Munich.
Un equipo dominador de principio a fin, pero que en la fase final disputada en Lisboa, se mostró implacable con sus rivales, sin dejarles apenas respirar. Si no que se lo pregunten a Barcelona de Leo Messi.
La final, sin embargo no fue un coladero de goles. Más bien fue un partido táctico y cerrado donde cada uno planteo su idea de juego. Bayern tocando y llegando y PSG esperando el momento para salir con sus flechas al arco rival.
Sin embargo, el partido se rompió con el gol de Coman, que metió con golazo a pase de Kimmich, espectacular también en toda la noche.
Ahí, el PSG de desactivo por completo y se le nublaron las ideas, que más allá de tres oportunidades al final del encuentro (que casi mete) no supo como responder a un Bayern que fue sobre todo, un equipo.
Las lágrimas de Neymar
No fue el protagonista que debió ser en la final de champions. Hizo un partido correcto con algunas arrancadas de magia, pero se desgastó demasiado corriendo detrás de la defensa alemana. Y eso le pasó factura. Conecto dos o tres veces con Mbappe, pero no fue suficiente.
Y se quedó con Copa. Al finalizar el encuentro las cámaras lo buscaban. Pero él no estaba. Estaba ido, con lágrimas en los ojos, tal vez representando el sentimiento de un equipo entero: un equipo que por primera vez se veía cumpliendo el sueño de levantar la Champions. Ese sueño que comenzó en 2009 y que casi consiguen ayer.
Neymar nota que se le termina el tiempo. Un tiempo que dedicó a irse del Barsa para poder lucir. Pero que todavía no consiguió.
«Perder es parte del deporte, lo intentamos todo, luchamos hasta el final» dijo en su cuenta de Twitter, felicitando al rival.
Di María desconsolado
Ángel también cumplió un buen partido, y fue uno de los mas desequilibrantes en el ataque francés en la final de champions. Pero al final, nada podía consolarlo. Se sentó en el césped y lloró como Ney.
«Dimos nuestras vidas por esta camiseta, luchamos hasta el último segundo. El fútbol puede dar una revancha y sé que algún día este club la tendrá. El año del equipo fue increíble y seguiremos luchando como siempre» publicó Ángel en su cuenta de Instagram.
Icardi el gran desaparecido
La gran incógnita del partido. Al igual que en la semifinal, Icardi se quedaba afuera del partido. El último cambio realizado por Tuchel, fue otro delantero, Choupo Motin, autor del gol decisivo contra Lyon.
Tuchel había agotado todos los cambios y había preferido meter más delanteros que buscar a uno de calidad. Curioso, sobre todo cuando no tenían ya a Edison Cavani.
La decisión extraña, ya que Icardi fue uno de los máximos goleadores del PSG en el torneo con 5 goles, pero que sin embargo estuvo desaparecido en los tres últimos partidos. Una verdadera incógnita.